SOY GEORGINA

En 2022 la reconocida modelo y empresaria española Georgina Rodríguez lanzó a la plataforma Netflix su docureality “Soy Georgina”, el cual cuenta actualmente con 2 temporadas y 12 episodios. En él nos muestra cómo es su ajetreada vida acompañada de su marido Cristiano Ronaldo y sus hijos.

Se le ha calificado como docureality ya que ha sido ella misma la directora de contenidos, es decir, quien ha decidido qué se graba y qué no, qué se emite y qué no. Por ello no es un documental que muestra al cien por cien la realidad de su vida.

A lo largo del documental la argentina criada en España, Georgina Rodríguez, enseña cómo su vida ha dado un gran giro tras iniciar una relación con el futbolista portugués. Nos relata sus infinitos viajes a ciudades como Milán, Turín o Jaca, la ciudad en la que se crio. Recalca que es una persona de origen humilde pero que por suerte actualmente goza de numerosos lujos entre ellos casas, joyas o bolsos, con los que muestra su pasión por la moda. La popular modelo muestra asuntos más íntimos y personales, relacionados con su familia y amigos los cuales la acompañan a todas partes.

A pesar de que en el documental se posicione como humilde y nada materialista, la realidad es otra, pues este destila frivolidad y un estilo de vida excesivo y desmedido.

Realmente el único objetivo de este “reality” ha sido lavar su imagen tras las abundantes críticas recibidas por parte de la prensa. A pesar de ello, lo único que ha conseguido es darle la razón a todos esos medios. Si bien es cierto que muestra cómo colabora con alguna ONG y cómo recibe premios por su ayuda a los más desfavorecidos, se sitúa en el punto de mira pidiendo salud para ella en su discurso de agradecimiento.

A través de contradicciones constantes marca su carácter tendencioso y egoísta mientras lo camufla entre la actitud con sus hijos, amigos y personas desfavorecidas. No hay profundidad alguna y en ningún momento se da a conocer la verdad. Como es evidente, ha recibido cantidad de críticas tanto en medios online como en prensa: “una nueva pija por castigo que resulta imposible odiar”, “alarde de lujo”...

Myriam Gil de 2º de bachillerato C.